Noemí Martínez mató a su hija Olivia tras conocer que había perdido su custodia. Tras su detención ingresó en prisión provisional, donde la mantienen aislada ante la posibilidad de sufrir alguna agresión y bajo el protocolo antisuicidio
La dirección del centro penitenciario de Villabona (Asturias) ha decidido ingresar a Noemí Martínez Largo, la filicida de Gijón, acusada de matar a su hija Olivia, en un módulo terapéutico de la prisión, en el que convivirá con internas poco conflictivas.
Según asegura The Objective, la junta de tratamiento de la cárcel ha determinado su clasificación provisional en esta sección, al considerar que Martínez puede correr peligro en el módulo de mujeres, donde correspondería su ingreso en otras circunstancias. Se pretende evitar, de este modo, que la filicida pueda ser agredida por otras reclusas.
Además, se ha activado el protocolo antisuicidio, por lo que Noemí Martínez estará siempre acompañada por internas de confianza o por funcionarios de prisión para evitar que la mujer se quite la vida.
La mató tras perder la custodia
Cabe recordar que la detenida, que no ha querido declarar ni en sede policial, ni judicial, está acusada de matar a su hija Olivia de 6 años, al suministrarle un coctel mortal de pastillas: una mezcla de ansiolíticos y de antinflamatorios que tenía recetados por prescripción médica. Lo hizo tras conocer que había perdido la custodia de la menor y negarse a entregar la pequeña a su exmarido, Eugenio García.
Después de suministrarle las pastillas, Noemí, de 48 años, también ingirió una mezcla, aunque no letal. Luego, se abrazó al cuerpo inerte de su hija hasta que un familiar, al no recibir respuesta de la madre, alertó preocupado a los cuerpos policiales. A la mañana siguiente, es decir, este pasado lunes, el cuerpo sin vida de Olivia fue encontrado en el piso en el que vivía con su madre. La mujer quedó detenida in situ.
Olivia murió intoxicada
La autopsia, tal y como informa El Ideal, no refleja signos de asfixia mecánica, es decir, que Olivia no habría fallecido por una obstaculización de las vías respiratorias, sino por la propia intoxicación letal de los medicamentos.
Con todo, Noemí Martínez ingresó este miércoles en prisión, tras comparecer ante la jueza que lleva el caso y negarse a declarar. Tanto la magistrada como la Fiscalía aprecian “riesgo de fuga” si se dejaba a la presunta asesina en libertad provisional.