Los ladrones colocaban un dispositivo de geolocalización en las motos que querían sustraer para saber dónde solía estar estacionada. Una vez localizadas, y sin la presencia de testigos, las manipulaban para robarlas
Agentes de los Mossos d’Esquadra de la Unidad de Investigación del distrito barcelonés de Sant Martí han detenido a dos personas por su presunta relación con el robo de 25 motos desde el pasado mes de marzo.
Según un comunicado de la policía catalana, los ahora detenidos habían perfeccionado su modus operandi, llegando a colocar un dispositivo de geolocalización en las motos que querían sustraer para saber dónde solía estar estacionada: ya fuese en la vía pública o en un aparcamiento privado.
El robo
Una vez tenían bien localizada la motocicleta a la que, previamente, le habían colocado el dispositivo de localización, se iniciaba una última fase: el robo. Para ello, forzaban los accesos a los aparcamientos privados y manipulaban la centralita electrónica de la motocicleta para arrancarla y llevársela. En el caso de que “la víctima” estuviese estacionada en la calle, forzaban igualmente la puerta de entrada del parking más cercano para poder proceder a las tareas de manipulación sin la presencia de testigos.
De este modo, y mediante un dispositivo electrónico casero, podían arrancar las motocicletas y huir subidos a ellas. Posteriormente, las dejaban estacionadas durante unos días en zonas poco concurridas o en aparcamientos públicos. De este modo, se aseguraban que los propietarios no hubiesen instalado ningún dispositivo de localización GPS. El objetivo era evitar exponer el taller mecánico donde las revendían.
Dos detenidos en Barcelona y otros dos en Vic
Cuando se aseguraban que no había dispositivos de geolocalización, llevaban las motos hasta un local de Vic (Barcelona) donde las revendían por 500 euros. Las dos personas que se encargaban de recibirlas las desmontaban para venderlas por piezas. En pocos caso se vendió entera y siempre era para clientes que vivían en el extranjero.
Con todo, fue el elevado número de denuncias lo que llamó la atención de los Mossos de Sant Martí, que iniciaron esta investigación. Como resultado, se detuvo a dos personas en Barcelona como presuntas autoras de 25 robos y a otras dos en Vic por un presunto delito de receptación, al comprar dichas motocicletas. Durante las entradas y registros se pudieron recuperar nueve de las motos sustraídas.
Finalmente, los detenidos quedaron en libertad con cargos después de declarar ante la autoridad judicial.
