Minutos antes de las 13.00h del pasado 10 de octubre el estruendo de varios disparos enmudeció el barrio de Campclar de Tarragona. Tras los primeros segundos de caos, la escena dejó entrever una persona tumbada en el suelo, rodeada de un charco de sangre. Se trataba de un hombre de 50 años que terminó falleciendo poco después por el impacto de una bala cerca del pulmón.
De forma casi instantánea, llegó la primera llamada a la centralita del 112 de Reus. El grueso de los vecinos del barrio seguían siendo ajenos al enfrentamiento que se estaba produciendo entre dos clanes rivales en la calle Riu Brugent mientras todo el engranaje policial se ponía en marcha.
El gran trabajo invisible
La salita del 112 alertó de inmediato a la Sala Regional de Mando de la región policial de los Mossos d’Esquadra en el Camp de Tarragona, que activó las primeras patrullas de Seguridad Ciudadana. “Esta sala regional se encarga de gestionar todos los recursos policiales de los que dispone cada región de la policía catalana con el objetivo de optimizarlos y dar la mejor respuesta a cada situación”, explica el Intendente Joaquim Bayarri, jefe del Centro de Mando de la Jefatura de Mossos.
Sin embargo, los elementos que habían marcado el tiroteo en el barrio de Campclar (armas de fuego, disparos en plena vía pública, un hombre muerto y la posibilidad de que algunas personas se hubiesen atrincherado) obligaron a tildar el incidente como “grave”. Esta calificación provocó un nuevo movimiento en el invisible engranaje policial, ya que exigió la activación del Jefe de Turno Regional Operativo que constituyó, in situ, un Centro de Mando Avanzado.
Del Centro de Mando Avanzado al el Jefe de Turno Central
“Este Centro de Mando Avanzado se instaló en las inmediaciones de donde se habían producido los disparos y sirve para que el Jefe de Turno Regional Operativo, el máximo responsable operativo de la región, pueda tomar decisiones junto con el resto de jefes de las distintas unidades que van llegando al lugar de los hechos”, expone Bayarri a preguntas de eltaquigrafo.com.
En este contexto, y dada la gravedad del suceso, una de las primeras decisiones fue dar parte al Jefe del Turno Central, una instancia superior, para empezar a movilizar recursos centrales como: la Unidad Hélix (los medios aéreos), la Brigada Móvil (BRIMO), el Grupo Especial de Intervención (GEI) y, en este caso también, un grupo de negociadores.
En la cúspide: la Sala Directiva
Acto seguido, se decidió constituir la Sala Directiva. “Esta sala sirve para gestionar incidentes o emergencias graves. La formamos el Comisario Jefe de los Mossos, Eduard Sallent; el Jefe de la Comisaría de Intervención, máximo responsable de unidades como los GEI, la BRIMO o la Unidad Hélix; el Jefe de todas las regiones policiales; la subjefe del cuerpo; los compañeros de comunicación; y, yo mismo, como responsable de Centro de Mando de la Jefatura de Mossos”, aclara el Intendente.
#REPORTAJE🔵| @el_taquigrafo se cuela en la “Sala Directiva” del Complejo Central de Egara @mossos desde donde la cúpula del cuerpo sigue en directo los incidentes más graves que suceden en todo el territorio y desde donde se toman las decisiones más importantes pic.twitter.com/lZTi0Bgjiz
— El Taquígrafo (@el_taquigrafo) November 6, 2023
La última palabra en estos casos la tiene el comisario jefe, ahora Eduard Sallent. Sin embargo, el incidente tiene que revestir de la gravedad suficiente para que se activen todas estas instancias de control y gestión de recursos policiales hasta llegar a la cúspide. “La Sala Directiva tan solo se constituye en casos realmente extraordinarios. Anualmente suele ocurrir entre 4 o 5 veces. El resto de los incidentes, más ordinarios se resuelven a novel regional, en el territorio, o central con el Jefe de Turno Central”, matiza Bayarri.
Con capacidad de ver más de 600 cámaras en directo
Ahora bien, con la Sala Directiva constituida sus integrantes tienen la capacidad de poder visionar en estricto directo cualquiera de las más de 600 cámaras que dispone el cuerpo ya sea en vehículos y furgones policiales, medios aéreos o colocadas en la indumentaria de sus agentes. “De hecho – apunta el Intendente – la nueva flota de vehículos ya vienen con la instalación de una cámara en la parte delantera”.
Esta información visual facilita la toma de decisiones, especialmente a la hora de resolver qué recursos centrales se tienen que movilizar o cómo puede afectar el incidente en cuestión a las regiones policiales aledañas. Además, según Bayarri, es un apoyo indispensable para el Centro de Mando Avanzado que está siguiendo el incidente desde el lugar de los hechos.
La importancia de la inmediatez
“Desde que suceden los hechos, se monta el Centro de Mando Avanzado y hasta que se decide constituir la Sala Directiva pasan pocos minutos. El engranaje de los Mossos está diseñado para dar la respuesta más rápida y eficaz posible y las comunicaciones entre unos y otros son inmediatas”, declara Bayarri.
En el caso de Tarragona, pasaron escasos 20 minutos desde que se produjeron los disparos hasta que se constituyó la Sala. No obstante, antes de ello el Jefe del Turno Central, desde el Complejo Central de Egara (Terrassa), e informado por Jefe de Turno Regional Operativo, ya movilizó varios de las unidades centrales para que partieran dirección Tarragona.
Sobre las 15:15 horas, dos horas después del inicio del incidente en el barrio de Campclar, los Mossos tomaron el control de la situación e identificaron a las personas presuntamente implicadas. “Hay mucho trabajo policial que no se ve”, declara Bayarri. Y no sólo cuando suceden incidentes graves.
Entre 14.000 y 17.000 incidencias semanales
Cada región policial dispone de su Sala Regional de Mando donde los agentes destinados reciben, de forma constante, todas las alertas que llegan del 112. Estas salas son la primera instancia para la toma de decisiones inmediatas y para gestionar y optimizar los recursos disponibles en cada zona.
Según la gravedad de los hechos se requerirá de la activación del Jefe de Turno Regional Operativo, o incluso del Jefe del Turno Central, y, en casos más extraordinarios de la Sala Directiva. “Para haceros una idea de la magnitud de incidencias que resolvemos los Mossos, unas más graves que las otras, cada semana se atienen entre 14.000 y 17.000 emergencias en toda Catalunya, y en la mayoría de los casos no es necesario, ni siquiera, alertar al Jefe de Turno Central”.
Retos a corto plazo
A corto plazo, añade el Intendente, la Jefatura de los Mossos pretende dotar a cada Región Policial de una furgoneta con pantallas y la tecnología necesaria para poder seguir los incidentes más graves tal y como se ven desde la Sala Directiva. De este modo, desde el interior de los vehículos también se podrán visionar las más de 600 cámaras de las que dispone el cuerpo.