El detenido, que ya se encuentra en prisión, confesó haber matado a su mujer en 2021. Luego congeló su cuerpo descuartizado y, un año después, enterró los restos en la finca de Pontons (Barcelona), donde fue localizado el cuerpo de la mujer
El pasado 3 de enero, agentes del Servicio de Protección de la Naturaleza (SEPRONA) de la Guardia Civil fueron alertados por parte de un vecino de Pontons (Alt Penedès, Barcelona) que un sujeto desconocido había estado excavando de forma sospechosa en un finca de dicha población. El SEPRONA rápidamente se movilizó, ante la posibilidad de un enterramiento ilegal de alguna especie animal o, incluso, de alguna irregularidad medioambiental.
Sin embargo, tras una primera inspección en el lugar de los hechos, los agentes del Servicio de Protección de la Naturaleza ya contemplaron la posibilidad de que el caso, en realidad, tuviese que ver contra la integridad física de alguna persona. Por eso, la Benemérita puso los hechos en conocimiento del Juzgado de Instrucción 4 de Vilafranca del Penedès.
Encontraron el cuerpo de una mujer repartido en bolsas
De inmediato, la autoridad judicial autorizó la excavación del terreno y efectivos de la Unidad Orgánica de Policía Judicial de la Guardia Civil de Barcelona se pusieron a buscar en la zona indicada. Los agentes, tras un trabajo en tiempo récord, encontraron a dos metros de profundidad el cuerpo descuartizado de una mujer, repartido en varias bolsas de plástico.
Acto seguido, los agentes de élite de la comandancia de la Guardia Civil de Barcelona detuvieron ese mismo día, 3 de enero, al propietario de la finca como presunto autor del crimen.
El marido confesó
En saber que habían descubierto el cuerpo, el mismo asesino se hundió y confesó a los agentes que el cadáver era de su pareja y que había sido él quien la había asesinado. Los hechos, según ha podido saber eltaquigrafo.com, sucedieron en 2021. El detenido asesinó a su mujer, de 42 años y de nacionalidad española, la descuartizó y guardó sus restos, durante meses, en un congelador de su piso en el barrio de Gràcia de Barcelona.
Un año después del crimen, trasladó el cuerpo y lo enterró en la finca de Pontons, donde fue descubierto este pasado 3 de enero de 2023. Aun así, la Guardia Civil sigue pendiente de los resultados de los estudios forenses y la comparación de las muestras de ADN, que terminarán de confirmar si se trata de la pareja sentimental del detenido.
Prisión provisional
Con todo, el sospechoso pasó a disposición de la autoridad judicial, que este jueves decretó su ingreso en prisión provisional, comunicada y sin fianza. Según detalla el Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC), no consta que hubiera ninguna denuncia previa por maltrato entre la pareja. El caso, aunque le dirigió en un primero momento el juzgado de guardia de Vilafranca, al encontrarse el cadáver en Pontons; finalmente se ha decidido traspasarlo a un juez de Barcelona, ya que en estos casos la investigación corresponde al juzgado más cercano al domicilio de la víctima.
Con todo, la causa sigue abierta por homicidio o asesinato, sin concretar hasta que avancen las diligencias, lideradas por la Unidad Orgánica de Policía Judicial de la Guardia Civil de Barcelona