Los sindicatos policiales en Catalunya lanzan una alerta a las instituciones políticas: ante los posibles disturbios que se pueden desencadenar durante estas fiestas ante el cierre total del ocio nocturno (macro botellones, en especial), los agentes siguen sin disponer del material suficiente y necesario tanto para velar por el cumplimiento de las nuevas medidas decretada, como para contener los daños que se puedan ocasionar.
En un comunicado del sindicato CSIF, al que ha tenido acceso eltaquigrafo.com, Eugenio Zambrano, secretario de la organización, pone de relevo que "la apertura del ocio nocturno supuso tener un control más fácil para alcanzar la seguridad y la contención de la COVID. Desde la apertura en octubre de estos establecimientos se ha producido una notable reducción en el número de botellones, grandes concentraciones en la vía pública y fiestas particulares. Esto ha supuesto una disminución importante de los conflictos en seguridad y convivencia, que con los macro y micro botellones teníamos. Por consiguiente, será imposible de controlarlo durante las fiestas, pero especialmente la noche de fin de año".
Es por eso, ante este posible escenario de conflicto e inseguridad ciudadana, que desde este sindicato piden más efectivos y más recursos. Declaran que la celebración de micro y macro botellones no frenará la expansión de la variante ómicron, finalidad por la que se han aplicado estas nuevas medidas. Añadiendo, además, que son el origen de muchos de los recientes problemas de convivencia y seguridad que se han vivido en Catalunya.
Prevén un incremento de los delitos asociados
Desde esta alerta sindical que lanza CSIF también quieren dejar constancia, basándose en la experiencia pasada, de que estas medidas provocarán que "se disparen más las infracciones penales relacionadas con estas grandes concentraciones de masa social, como por ejemplo: tráfico y consumo de drogas, agresiones y violaciones, robos con violencia o intimidación, hurtos, peleas multitudinarias, apuñalamientos y un largo etc. También a esta problemática de seguridad se sumará otra de convivencia; molestias vecinales, incivismo, destrozos y deterioro del mobiliario".