Los Mossos d’Esquadra encargados de esclarecer la muerte del joven de 17 años en Gavá, investigan las circunstancias del suceso y, todavía a la espera de la autopsia, tratan de determinar si fue una muerta de origen criminal o, por el contrario, un suicidio.
Como ha podido saber elaquigrafo.com, el cuerpo del menor presentaba una herida causada según los primeros indicios por un arma blanca, la cual fue encontrada junto al cuerpo. Las circunstancias que rodean esta muerte violenta, sin embargo, no apuntan a que se trate de un homicidio.
Se desvió de su trayectoria habitual
El joven, un muchacho adoptado de origen etíope, se desvió este lunes de su trayecto habitual, cuando se dirigía al Instituto Sagrada Familia, según han confirmado a este medio fuentes cercanas a la investigación.
Lejos de su centro escolar, cerca de las 11h de la mañana, fue hallado sin vida en una zona ajardinada entre MercaGavà y la zona deportiva de Can Tintorer.
Sin precedentes
Y, aunque los agentes encargados del caso, con toda la prudencia posible, consideran que no están ante un homicidio, reconocen que existen muy pocos casos de “auto apuñalamiento”. Por lo que están ante una situación con pocos precedentes que sirvan de patrón.
Fuentes consultadas, consideran que son “poco habituales” las muertes por suicidio bajo esta práctica, pues ante situaciones extremas, “tu cuerpo lucha contra ti mismo”. Los agentes no descartan la posibilidad de que el joven hubiese consumido estupefacientes previamente al suceso.
Todo ello, se confirmará con los resultados de la autopsia, aún por conocer.
