La Policía Nacional ha desarticulado una red criminal dedicada al tráfico ilegal de coches de alta gama. En la operación, que se ha llevado a cabo en Alicante, Almería, Jaén, Madrid, Murcia y Tarragona, han sido detenidas 82 personas y se han incautado 58 coches de lujo. Se estima por fuentes policiales que el valor del fraude realizado por la organización podría llegar a los 10.000.000 de euros.
De Murcia a Eslovenia
La investigación se inicia en la frontera con Eslovenia en febrero del pasado año, cuando se detecta a una persona de nacionalidad rumana a bordo de un vehículo con el permiso de circulación falsificado, el turismo, propiedad de una empresa de renting española, había sido matriculado diez días antes en la localidad de Murcia y entregado en esa ciudad al administrador de una empresa con sede en Barcelona.
Poco después, otra persona intentó cruzar la misma frontera con otro vehículo de similares características, también con la documentación falsificada, un contrato de compraventa ficticio y también propiedad de una empresa de renting española, que igualmente había sido matriculado días antes y entregado en la localidad de Murcia al administrador de otra mercantil con sede en Almería.
Así, la investigación policial detecta que existen dos empresas presuntamente no relacionadas entre sí, que contrataron y recibieron vehículos en Murcia que, a su vez, acabaron cruzando la frontera de Eslovenia con la documentación falsificada. Los agentes también descubrieron que las dos personas que conducían los vehículos habían entrado en España en avión días antes con billete solo de ida y que no era la primera vez que lo hacían.
Empresas de leasing como tapadera
El modus operandi de la red se basaba en la creación de empresas por toda España para contratar servicios de renting o leasing de vehículos que posteriormente, tras falsificar la documentación, eran destinados a la venta tanto en España como en distintos países europeos
Los coches se ponían a la venta a bajos precios a otros entramados delincuenciales que a su vez los vendían a compradores de buena fe. Los investigadores detectaron que en algunos casos y siguiendo la misma metodología los vehículos también eran vendidos dentro del territorio nacional.
Conseguidores y “mulas”
Así mismo, también utilizaban “mulas” y conseguidores. Éstos eran personas mediante empresas o en su propio nombre obtenían los vehículos para posteriormente cederlos a la organización. Los intermediarios o tratantes se encargaban de vender o introducir los vehículos en el mercado legal, otros realizaban las gestiones y la documentación necesarias para lograr la transferencia de los automóviles.
Las “mulas”a su vez, son individuos que, a cambio de una compensación económica, facilitaban su identidad para llevar a cabo el cambio fraudulento de titularidad de los coches y con responsables de establecimientos y negocios de compraventa que realizaban las transacciones.
Por estos hechos, a los 82 detenidos se les imputan, entre otros delitos, el de pertenencia a organización criminal, estafa, alzamiento de bienes, falsedad documental, extorsión y blanqueo de capitales.