El barrio de Santa María de Montcada (Barcelona) es una zona tranquila, adornada con casas adosadas y grandes chalés. Hay poca actividad comercial, pero los vecinos ‘de toda la vida’ tienen reunión semanal cada sábado por la mañana en el bar, popularmente conocido como el “Petit”. Es uno de los míticos, justo enfrente de la estación de tren Montcada-Santa María.
Como han relatado a eltaquigrafo.com algunos de los vecinos ahí presentes: “nos sorprendió la presencia de un hombre desconocido desde primera hora de la mañana”, ya que no es precisamente una zona que suela llenarse de gente de fuera. Todo tenía un porqué y horas más tardes lo descubrirían.
Movido por los celos
Cerca de las 10h30 de la mañana de este sábado, tras varias horas dentro y cerca del establecimiento, un joven de 26 años y de nacionalidad española, salió disparado del mítico bar y se lanzó al cuello de otro hombre, de 33 años y origen venezolano. En plena vía pública, a plena luz del día.
Tras una breve discusión, que alarmó a los vecinos del cruce de la calle Alzina, el joven sacó de debajo de su ropa un cuchillo de unos “30, 40 centímetros”, según han explicado testigos del crimen, y empezó a apuñalar “sin piedad” al otro hombre hasta que se cansó.
La víctima paseaba por el barrio con su actual pareja, una joven venezolana de 29 años que, al parecer, había mantenido una relación sentimental anterior con el agresor. La mujer fue retenida mientras chillaba y suplicaba piedad por los vecinos que se encontraban en el “Petit”.
Como recogen las primeras pesquisas policiales, el asesino parece haber actuado movido por los celos que sentía hacia la pareja actual de su exnovia. El resultado: un brutal ensañamiento a plena luz del día.
Más de 30 puñaladas
Varias fuentes vecinales han explicado a este medio como el agresor salió disparado del bar, donde se encontraba desde primera hora de la mañana de este sábado, y se lanzó “sin piedad y con la frialdad absoluta” al cuello del otro hombre.
Los gritos de ambos, durante la discusión inicial, provocaron que los clientes del bar saliesen a separarlos. Pero estos no pudieron hacer nada cuando la víctima cayó al suelo y empezó la dantesca escena, que duró, según los mismos clientes, más de 5 minutos. Durante este tiempo y de forma ininterrumpida, el agresor apuñaló al hombre sin cesar.
Gran actuación vecinal
Varios testimonios aseguran que la víctima recibió más de 30 puñaladas en el cuello, el pecho y la barriga. Además, como ha podido saber este medio, el agresor seccionó los genitales de su víctima antes de terminar con su vida. Una vez el presunto se rindió exhausto, “lanzó el cuchillo a un jardín privado justo en frente del bar” y se dispuso a huir.
Para sorpresa del agresor, los clientes del bar y los transeúntes que presenciaron la brutal escena pudieron retener al joven con sillas, palos y un fuerte “cordón vecinal”. Incluso algunos de los que fueron testigos de la macabra escena liberaron su frustración dándole una paliza. La rápida reacción de los ahí presentes permitió que, a la llegada de los Mossos d’Esquadra, el asesino fuese detenido de inmediato.
Los servicios médicos no pudieron hacer nada por su vida
A la llegada de los Mossos y el SEM, los asistentes sanitarios no pudieron hacer nada por la vida del joven venezolano. A pesar de la brutal agresión, cuando llegaron los médicos la víctima seguía con vida. Minutos más tarde se confirmó su muerte y se alertó al juez de guardia.
Mientras, los servicios de emergencias atendieron a la joven que ha necesitado asistencia psicológica.
Horas más tarde, sobre las 13h20 del mediodía, los servicios judiciales ordenaron el levantamiento del cadáver y se llevaron a la víctima al Instituto Forense donde se le practicará la autopsia.
La pareja llevaba dos meses en el barrio
La pareja no era muy conocida en la zona, aseguran los vecinos. De hecho, tan solo llevaban dos meses viviendo en el barrio residencial de Montcada i Reixac.
Por otro lado, según ha podido saber eltaquigrafo.com, el asesino tampoco era vecino de este municipio barcelonés, fuentes policiales han confirmado que no está inscrito en el censo municipal y que seguramente vendría de otro municipio, con el único objetivo de atacar a la que finalmente fue su víctima.
Con todo, los investigadores de la Región Policial Metropolitana Norte de los Mossos d’Esquadra se han hecho cargo de un caso que presenta pocas dudas porque cuenta con decenas de testigos oculares y el presunto asesino ya en dependencias policiales. Precisamente el estallido de violencia que ha vivido este tranquilo y residencial vecindario será imposible de olvidar por un largo tiempo.
Algunos de los testigos de esta criminal agresión van a precisar de atención psicológica, porque a pesar de que los servicios municipales limpiaron la calle a las pocas horas, pequeños y grandes fueron testigos de la dantesca escena.
