La Guardia Civil ha detenido en Cangas de Onís (Asturias) al hombre que agredió con violencia a un agente de la Benemérita a las puertas de una sucursal de Caja Rural este domingo por la tarde. Según fuentes policiales, los hechos se desencadenaron después de que el propio agresor pidiera atención sanitaria al sentirse "paranoico". Sin embargo, una vez llegó la asistencia en ambulancia se negó a recibirla y se puso violento, agrediendo a varios agentes de la Guardia Civil: a uno de ellos con especial contundencia, al propinarle varias patadas incluso cuando el policía yacía en el suelo.
Tal y como aseguraron fuentes de la Benemérita al medio La Nueva España, los agentes acudieron a la avenida de Covadonga del citado municipio tras ser alertados de que había una persona en estado de gran alteración. La Guardia Civil fue en apoyo de la Policía Local de Cangas de Onís y los servicios sanitarios. A su llegada interceptaron al hombre, que venía del festival de música electrónica del Aquasella con evidentes síntomas de intoxicación, medio atrincherado en la entrada de la entidad bancaria. Los agentes estaban tratando de tranquilizarle cuando la emprendió a golpes contra ellos. Estaba fuera de sí y en pleno "brote psicótico", apuntan fuentes conocedoras de los hechos.
#Sucesos 🔵| Un Guardia Civil resultó herido este domingo en Cangas de Onís (Asturias) tras ser agredido por un hombre. El agresor había pedido atención sanitaria al sentirse "paranoico", pero una vez llegó la ambulancia se negó y se puso violento pic.twitter.com/Z3XpOknrB5
— El Taquígrafo (@el_taquigrafo) August 21, 2023
Le propinó fuertes golpes en la cabeza
Como se ve en las imágenes a las que ha tenido acceso eltaquigrafo.com, cada vez que los agentes trataban de tranquilizarlo, el hombre respondía con más y más contundencia, totalmente alterado y fuera de sí. El agente de la Guardia Civil que salió peor parado recibió varios golpes y patadas en la cabeza, incluso después de caer al suelo. La Policía Local y los sanitarios tuvieron que llevarse al herido a rastras mientras otros compañeros trataban de calmar al agresor.
Finalmente, tras varios minutos de violento enfrentamiento, los agentes consiguieron reducir al violento para calmarle con una inyección. El festivalero tiene "unos 40-50 años", aunque en un principio parecía más joven, pero luego se descubrió que llevaba peluquín, matiza el medio citado anteriormente. Tras calmarlo quedó detenido y fue trasladado al hospital para calmar su estado de agitación por la intoxicación.
Paralelamente, el Guardia civil herido fue trasladado al hospital del Oriente, en Arriondas, con un traumtatismo craneal.