Agentes de la Unidad de Investigación de los Mossos d’Esquadra de la comisaria de Martorell (Barcelona), detuvieron el pasado domingo 5 de abril a un hombre de nacionalidad marroquí, de 40 años y vecino de Cornellà de Llobregat, como presunto autor de dos delitos de abusos sexuales y un delito de agresión sexual a tres mujeres que paseaban cerca del río en la localidad de Sant Andreu de la Barca.
Con ellas, se suman tres casos más a la larga e innumerable lista de mujeres que lamentan haber sido víctimas de violencia sexual a manos de un hombre, en este caso un completo desconocido. Estos casos, cabe mencionar, no se contabilizan en el balance mensual de la Delegación del Gobierno para la violencia de Género, pues solo se cuentan las fallecidas… de hacerlo las cifras serían todavía más escalofriantes.
No fueron agresiones con penetración
La investigación se inició a finales del año 2018, cuando se tuvo conocimiento de un presunto abuso sexual en Sant Andreu de la Barca. Ocurría el pasado 30 de octubre, cuando la víctima, mientras hacía deporte por la orilla del río, notó como un hombre la agarraba por la cintura y tiraba de ella hacia atrás, pero consiguió deshacerse del agresor y el hombre huyó.
Posteriormente, en el mes de febrero del 2019 se produjo una agresión sexual en el mismo municipio, también por la orilla del río. El agresor se abalanzó sobre la víctima e intentó tirarla al suelo, mientras le hacía tocamientos, pero la víctima logró que la soltará y el agresor se fue.El 15 de marzo, los investigadores tuvieron conocimiento de un tercer hecho similar junto al río, en la localidad de El Papiol (Barcelona).
Agentes de la policía catalana cercanos a la investigación han confirmado a eltaquigrafo.com que se trata de “agresiones incompletas, sin penetración”. Al no haber violencia física, pues según explican los agentes, solo fueron tocamientos superficiales, las mujeres no necesitaron una revisión médica y su estado de salud es bueno.
Los relatos condujeron a un mismo agresor
En este sentido, agentes del caso han explicado a este medio que, tras los relatos de las víctimas, con varios puntos en común, sobre todo porque los tres habían sucedido ceca del río, se plantearon la posibilidad de estar ante un mismo y único agresor.
Fue entonces cuando la Unidad Central de Fotografía y Audiovisual de la policía autonómica, en base a las descripciones facilitadas por las víctimas, pudo realizar un retrato robot del presunto autor, facilitando, así, su identificación.
El retrato se pudo efectuar gracias a que las mujeres recordaban detalles del rostro de su agresor. Según fuentes policiales, “al tratarse de agresiones menores (al no haber penetración), las mujeres quedan menos bloqueadas y es posible recordar la imagen de su agresor”.
Finalmente, el domingo, los investigadores le detuvieron por los alrededores del río Llobregat, en Martorell. El arrestado pasó a disposición judicial y el juez instructor decretó su ingreso judicial en un hospital psiquiátrico.