El crimen de Castro Urdiales: "guardé la cabeza porque era mi único recuerdo"

La mujer y su pareja, la presunta víctima.
photo_camera La mujer y su pareja, la presunta víctima.
La vecina que abrió la caja pensaba que en su interior había juguetes sexuales, pero el hedor que desprendía hizo saltar las alarmas.

Lo que está viviendo el costero

municipio de Castro Urdiales, en Cantabria, supera con creces cualquier oscuro

y rebuscado relato de novela negra. Una historia que, en pocos días, ya acumula

muchos interrogantes, hipótesis y conspiraciones. ¿Por qué María del Carmen M.

entregó una caja con una cabeza humana a su amiga? ¿Había algo entre la vecina que

recibió la caja y la pareja sentimental de la detenida? ¿O, simplemente, fue

pura casualidad?

El juzgado de instrucción,

número 3, de Castro Urdiales, encargado de la instrucción del pintoresco y

trágico suceso ha blindado el caso con un rígido secreto de sumario y, todavía,

no se puede saber qué es lo que ocurrió exactamente, ni si quiera si el cráneo

pertenece a Jesús María B., pareja sentimental de María del Carmen, del que no

se sabe nada desde la pasada primavera. Aunque, ciertamente, fuentes cercanas a

la investigación, llevada a cabo por la Guardia Civil, aseguran que las

primeras indagaciones apuntan a que se trata del cráneo del desaparecido.

Encuentran el cráneo y detienen a la mujer

El lunes, la Guardia Civil

detuvo a María del Carmen M. (gaditana, de 62 años) por, supuestamente, haber

asesinado a su pareja sentimental en Castro Urdiales y haber entregado la

cabeza de la víctima a una amiga suya en el interior de una caja. Hace unos

meses, cuando iban a registrar su domicilio por la desaparición de Jesús María,

envolvió el cráneo en papel de regalo y le pidió a una conocida que se le

guardase mientras duraban los registros. La detenida le dijo que dentro

había consoladores y bolas chinas que no quería que descubrieran los

agentes para no causar una mala impresión.

El martes, el juez de primera instancia acordó prisión

provisional, comunicada y sin fianza para la sospechosa. Todavía no hay

confirmación oficial de a quién pertenece la cabeza encontrada en la caja, pero

el servicio de Criminalística de la Guardia Civil trabaja con

la hipótesis de que es Jesús, un empleado de banca jubilado, que

desapareció el pasado 11 de abril. María del Carmen tardó varias semanas en

denunciar su desaparición (llevaban siete años de relación) y explicó que él la

había abandonado. En una segunda versión, apuntó que había notado que alguien

la seguía y manifestó a las autoridades tener sospechas de que la desaparición

de su pareja sentimental era resultado de un ajuste de cuentas.

Se está investigando si la cabeza fue tratada con alguna

sustancia química y dónde está el resto del cuerpo.

Sintió un fuerte hedor

La amiga de María del Carmen guardó la caja sin reparos en el

trastero de su domicilio durante meses y no la tocó para no dañar el papel de

regalo, pero la madrugada del viernes al sábado, decidió abrirla por el fuerte

hedor que desprendía. Dentro se encontró con un cráneo sin ningún resto de

tejido y el susto fue tal que al llamar a la Guardia Civil necesitó atención

médica al entrar en estado de shock.

Según señalaba el diario ABC, tras superar el shock, esta mujer llamó a María del Carmen para explicarle que había abierto la caja, ésta le respondió que iba de inmediato a su casa. "No hace falta, ahora van a buscarte a ti", le respondió para avisarle de que la iban a detener.

El único recuerdo que tenía de él

Cuando los agentes arrestaron a la pareja sentimental de Jesús —no estaban casados, pero vivían juntos— ella trató de defenderse diciendo que alguien le dejó la cabeza en la puerta de casa. "La guardé porque era el único recuerdo que tenía de él", sostuvo. El cráneo, de acuerdo con lo que avanzó Espejo Público en Antena 3, fue hervido en agua y envuelto en papel de aluminio, probablemente para evitar que desprendiera olor.

La presunta homicida tiene antecedentes por dos estafas

cometidas en los últimos años. Una de ellas, en Vigo, en 2013, y la otra, más

reciente, en 2017. En este último caso, primero entró en casa de su tía y de su

pareja y se hizo con documentación bancaria y 300 euros y, más tarde, una vez

que esa pareja se rompió y ella se fue a vivir con su tía a Cádiz, estafaron al

hombre 6.600 euros.

Varios vecinos aseguran estar consternados y desean

que se resuelva el caso y se haga justicia para Jesús María.

Comentarios