Hace medio año, un alumno de 15 años del Instituto de Vidreres apuñaló con un cuchillo de 13 centímetros a su profesora mientras daba clase y estaba de espaldas, mirando la pizarra. El joven intentó acuchillarla en las costillas, aunque acabó causándole heridas en el cuello y el abdomen. El menor huyó de la clase, pero fue detenido por la Policía Local de Vidreres en el patio del instituto.
Conforme con la condena
Por esos hechos, el estudiante de cuarto curso de la ESO deberá cumplir un año de internamiento en régimen cerrado en un centro de menores y otro en libertad vigilada con la prohibición de acercarse a menos de 400 metros de la víctima durante cinco años. Además, el joven deberá satisfacer la responsabilidad civil e indemnizar a la víctima con 7.000 euros.
Según fuentes a las que ha tenido acceso eltaquigrafo.com, el menor se ha mostrado satisfecho con la pena impuesta tras el acuerdo al que han llegado fiscalía, defensa y acusación particular. La sentencia, que es firme, y por lo tanto no podrá ser recurrida, lo condena por un delito de tentativa de homicidio en concurso con otro de atentado a la autoridad.
Conflictivo y reincidente
Según reza en la sentencia, el joven fue expulsado del instituto durante cinco días por “una sucesión de incidencias relativas a su comportamiento” y creyendo que el castigo le fue impuesto por la víctima, se tomó su propia revancha y atacó a la maestra mientras daba clase.
El fallo también recoge que el estudiante tenía afectadas “levemente” sus facultades cuando se produjo el ataque, por lo que a la hora de imponerle la condena se le ha aplicado una atenuante de alteración psíquica y una segunda de reparación del daño.
Seguirá escolarizado
A pesar de la gravedad de los hechos, al ser menor de 16 años el joven deberá continuar con sus estudios, aunque no forzosamente en el mismo instituto ni tampoco en un centro ordinario.