El presunto autor de las tres muertes registradas el pasado lunes en el distrito de Ciutat Vella de Barcelona ya está en prisión. Como adelantó este medio, el joven sueco —pero con NIE español—, de 29 años, es un individuo, según apuntan sus familiares, inestable y con antecedentes psiquiátricos. Los familiares del detenido, que se desplazaron desde Suecia tras conocer lo sucedido, aseguraron a los Mossos d’Esquadra que el sospechoso tomaba medicación, aunque no ha transcendido qué tipo de antecedentes psiquiátricos acumula en su país.
Lo cierto es que, en el momento de su detención, en la plaza de Sant Jaume, de Barcelona, se le incautaron pastillas antidepresivas y ansiolíticos, además de la documentación y las joyas de la mujer a la que, presuntamente, horas antes habría robado y empujado brutalmente por las escaleras de un edificio en la calle, Arc de Sant Vicenç, causándole la muerte.
Sin antecedentes graves en Suecia
Este medio ya adelantó que el detenido no tiene antecedentes penales ni judiciales en nuestro país. Aun así, todavía queda por resolver qué es lo que el detenido hacía exactamente cuando venía a Barcelona. En Suecia, por otro lado, a pesar de sus antecedentes psiquiátricos, a nivel penal solo fue interceptado en 2013 por la policía sueca con dos gramos de cannabis. Según ha apuntado ElCaso.com, el joven tuvo que pagar una multa de 250 euros y, desde entonces, nada hasta ahora. Como revela el citado medio, John Musetescu W. nació en 1991 en Uppsala, al norte de Estocolmo, la capital de Suecia, aunque en 1986 sus padres habían llegado al país desde Rumanía. Hasta 2019, como mínimo, vivió allí. Estaba casado con una mujer, de quien se separó a finales de 2018. Qué lo trajo a Barcelona, ahora mismo, sigue siendo un misterio.
Su detención fue posible gracias a una decena de testigos presenciales que vivieron, en primera persona, como el hombre apuñalaba de gravedad a un trabajador del consistorio barcelonés en la calle Paradís de la ciudad. Los gritos de alarma condujeron instantes después a varios agentes de la Guardia Urbana hasta el lugar de los hechos, donde pudieron detener al agresor. El funcionario finalmente falleció en el Hospital Clínic de Barcelona dos días después del incidente.
No conocía a sus víctimas
Fue entonces, tras apuñalar a un funcionario del consistorio barcelonés que, al detenerlo, los agentes pudieron relacionarlo con otras dos muertes violentas registradas hacia escasamente una hora. Con pruebas que lo relacionan directamente con los tres sucesos, por el momento, todo apunta a que el detenido no conocía a sus víctimas. De hecho, los investigadores de la División de Investigación Criminal (DIC) de la policía catalana no han podido establecer ninguna conexión del detenido ni con el primer hombre que apareció acuchillado brutalmente y con una bolsa en la cabeza en un piso del barrio del Born al que trató de prender fuego ni con la mujer que fue encontrada en el vestíbulo de una finca con un fuerte golpe en la cabeza ni, como ya se suponía, con el empleado del Ayuntamiento que recibió una puñalada mortal en el abdomen cuando se lo cruzó en una calle cercana a la plaza de Sant Jaume.
El juzgado de instrucción, número 19, de Barcelona, en funciones de guardia, recibió este jueves al hombre detenido por las tres muertes acaecidas este lunes en el distrito barcelonés de Ciutat Vella. El hombre se acogió a su derecho a no declarar y, tras su comparecencia, la magistrada acordó prisión provisional, comunicada y sin fianza. La causa sigue abierta por tres delitos de homicidio doloso, un delito de incendio, dos delitos de robo con violencia e intimidación, lesiones y amenazas.
Tres homicidios en menos de una hora
En poco menos de una hora, el detenido perpetró tres homicidios. La ruta criminal que siguió el hombre empezó en un piso cercano al Arc de Triomf. A las 15.05 horas, un hombre apareció muerto con una bolsa en la cabeza, en un piso incendiado que todo apunta a que fue provocado. La División de Investigación Criminal de los Mossos d’Esquadra se ha hecho cargo de la investigación para aclarar los hechos, pero varios vecinos, testigos de lo ocurrido, aseguraron a las autoridades que un hombre se descolgó por la fachada del edificio.
De hecho, según el auto de prisión, existen incluso imágenes grabadas por uno de los testigos, en las que se puede ver a una persona cuya vestimenta y rasgos físicos coinciden con el detenido. También fueron hallados en la mochila del detenido objetos que lo vinculan claramente con la víctima y ese domicilio.
El segundo suceso ocurría en la calle Arc de Sant Vicenç, cerca de la Fundación Joan Brossa. Los Mossos recibieron un aviso poco después de las 15.00 horas que les informaba de la presencia del cuerpo sin vida de una mujer en una vivienda, con un fuerte golpe en la cabeza. Los Mossos le encontraron «objetos que lo vinculan con la primera víctima», pero también con la segunda, de quien se había apropiado de la cartera con su documentación.
Finalmente, a las 16.00 horas, en la calle Paradís, cercana a la plaza de Sant Jaume, un funcionario del consistorio barcelonés fue apuñalado tras un robo con violencia. Durante el trayecto hasta la plaza Sant Jaume, donde acabaría con la vida del empleado del Ayuntamiento, robó una motocicleta que fue recuperada después de su detención.
Al final, todo cuadraba
Aunque en un primer momento parecía que eras tres hechos diferenciados, un cabo de la Guardia Urbana de Barcelona pudo relacionarlos todos: el detenido llevaba la misma ropa que el hombre que se escapó del piso en llamas y tenía cosas de la mujer muerta en la calle del Arc de Sant Vicenç. Todo cuadraba. Ya en prisión provisional, comunicada y sin fianza, la magistrada le acusa de tres delitos de homicidio doloso, un delito de incendio, dos delitos de robo con violencia e intimidación, lesiones y amenazas.