A las puertas de la cumbre de la OTAN, que en esta ocasión se celebra en el recinto del Ifema de Madrid, la Policía Nacional lleva meses organizando un macro dispositivo por todo el país, principalmente en la capital, para dar cobertura y seguridad a este evento de repercusión mundial, en un año tan crucial por el impacto de la guerra de Rusia contra Ucrania.
Cerca de 10.000 agentes de distintas unidades dejarán sus casas por una semana para cumplir con la protección de esta cumbre, que acogerá a 44 delegaciones internacionales. Se les exige un rendimiento sublime, para un evento excepcional.
JUPOL pide eficiencia
Sin embargo, lamenta el sindicato JUPOL, el rendimiento de los que toman las decisiones, de la Dirección General de la Policía y el Consejo de la Policía sigue muy lejos de lo que para el sindicato sería sublime.
JUPOL nació en 2018 de la voluntad de los policías, del cansancio que el colectivo sentía por el desamparo y la desigualdad que llevan años denunciando. Nació en la calle y estos días se prevén nuevas manifestaciones. La primera este lunes 27, para dar apoyo a las Unidades de Intervención Policial (UIP): los grupos antidisturbios de la Policía Nacional, desplegados durante esta cumbre, llegados de todas las partes del país, y con una desestructuración interna que llevan años pidiendo mejorar.
Equiparación, jornada laboral y procesos selectivos
De hecho, parte de los reclamos que definen la estrategia sindical de JUPOL tienen que ver, precisamente, con la reordenación de las jornadas laborales, en especial de los grupos de élite (GEO, GOES, UIP, UPR) para poder llevar a una conciliación familiar real. Actualmente, muchas unidades, explica Pablo Pérez, portavoz del sindicato a eltaquigrafo.com, combinan el horario “6x6”, es decir, trabajar seis días seguidos, librar otros seis. Sin embargo, esta opción que permite mejorar la conciliación, no es firme y ni se permite a todas las unidades.
Aunque sin duda, su lema inicial, y por el que siguen luchando, es por la equiparación salarial con otros cuerpos policiales autonómicos y locales. En 2017, nació Jusapol, una asociación no vinculante, ni con representación sindical, que aglutinaba a policías y guardias civiles por la equiparación salarial. Su voz, su lucha, movilizó a cientos de agentes, con manifestaciones masivas por todo el territorio nacional. Fue tal el reclamo, que, en 2018, los representantes del CNP decidieron constituirse como sindicato y presentarse a las elecciones del Consejo de la Policía.
La lucha sigue dentro del Consejo
El resultado fue histórico, obteniendo una mayoría sindical inédita: 8 de los 14 vocales vocales sindicales del Consejo fueron asignados a JUPOL. La Policía había hablado y su voluntad estaba clara: necesitaban un cambio. Desde entonces, asegura Pérez, JUPOL empezó a luchar por la equiparación, la reordenación de la jornada y la revisión de los procesos selectivos con una voz mayoritaria dentro del Consejo. Aún así, lamenta, “las decisiones no se negocian y los representantes de la Dirección General de la Policía ya vienen con las medidas dictadas. En el Consejo tan solo nos las comunican, no las debatimos”.
Plantean un conflicto colectivo
Es por eso, por lo que su última batalla pasa por solidificar el “conflicto colectivo”, y que el resto de los sindicatos con representación “se pongan el huelga” como ellos y no asistan a las reuniones del Consejo. De este modo, insiste el portavoz a este medio, “se bloquearían todas las decisiones, porque aunque nos vengan dadas, no se pueden poner en marcha sin que se celebre la reunión”. Sería la forma, asegura, de dar a entender que las cosas no van bien.
Al margen, después de dos años con la pandemia del coronavirus, su intención es volver a la calle. Como lo han hecho este lunes a favor de la UIP, y como también lo hicieron recientemente con una macro movilización motera por las calles de Madrid, reivindicando “la equiparación real ya”.
A las puertas de la cumbre de la OTAN, con una movilización masiva de policías, que triplica los número de agentes desplazados a Catalunya tras la sentencia del procés, JUPOL exige que la Dirección esté a la altura de las circunstancias y responda con medidas y soluciones reales. Su intención: seguir luchando, como hasta ahora, por los derechos de los policías.