El Juzgado de Instrucción de Lleida en funciones de guardia encargado de tomar declaración a los tres detenidos por reconocer ser dueños de una plantación de marihuana en Les Borges Blanques, tras denunciar el asesinato de su vigilante, han quedado en libertad provisional. Sobre ellos sigue pensando un presunto delito contra la salud pública, pero coge fuerza la hipótesis de que su compañero, cuyo cadáver todavía no ha sido localizado, fue víctima de un “vuelco” por parte de un clan rival.
Según ha podida saber eltaquigrafo.com, todo apunta a que el joven de 20 años que estaba realizando funciones de seguridad en la plantación exterior asaltada fue brutalmente asesinado por una organización intrusa que, además, se apoderó de 15 kilogramos de marihuana. Este tipo de “narcoasaltos”, conocidos en su jerga como “vuelcos”, no suelen ser sucesos que se denuncien, pues pocos narcotraficantes asumen las consecuencias directas de dicha denuncia: su detención; aseguran fuentes de la División de Investigación Criminal de los Mossos a esta redacción.
Victima de un posible “vuelco”
Sin embargo, en esta ocasión los denunciantes aceptaron la detención a cambio de que se investigue el asesinato de su vigilante, en una macro plantación de Les Borges Blanques (Les Garrigues, Lleida). Los tres narcotraficantes reconocieron ser los dueños de la plantación y explicaron que encontraron el cuerpo del joven con una bolsa en la cabeza. Tras conocer los hechos denunciados, los agentes se desplazaron hasta la plantación, pero cuando llegaron ya no había ningún cadáver, había desaparecido. No obstante, sí que encontraron indicios de criminalidad.
En total, hay tres personas detenidas, ahora en libertad, acusadas de un presunto delito contra la salud pública, ya que han confesado que son los responsables de la plantación, pero aseguran que no tienen nada que ver con el crimen que están investigando los Mossos d'Esquadra.