Ricart, según fuentes policiales, estaba a cargo de uno de estos ‘narcopisos’ investigados, y que funcionaba como un punto de venta de cocaína, heroína o crack y también de consumo para los usuarios.
Miguel Ricart, el único procesado por el triple asesinato de las niñas de Alcàsser (Valencia), y otro detenido han quedado en libertad provisional después de ser arrestados el pasado martes por gestionar un ‘narcopiso’ de El Raval. Así lo ha acordado este jueves el Juzgado de Instrucción 18 de Barcelona, que les ha añadido, además, la obligación de comparecer cada 15 días ante el juez.
Según la nota del Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC), la magistrada ha tomado esta decisión después de que la Fiscalía no solicitara ninguna medida cautelar. Además, los investigados han designado domicilio y no constan antecedentes computables en esta causa. Aun así, la causa está abierta por un presunto delito contra la salud pública.
Cocaína, hachís y marihuana
La detención del asesino de Alcàsser se produjo este martes por la tarde en el número 9 de la calle Aurora de El Raval de Barcelona. En el mismo dispositivo policial, compuesto por agentes de la Guardia Urbana y la Unidad contra el tráfico de drogas en pisos y locales de Barcelona de los Mossos, se intervino cocaína, hachís, marihuana y dinero en efectivo.
La unidad conjunta de los Mossos d'Esquadra y de la Guardia Urbana, que lucha contra el tráfico de droga en el Raval, descubrió hace varias semanas que Ricart estaba a cargo de uno de los ‘narcopisos’ investigados. La voz de alarma, sin embargo, la dieron los vecino del mismo bloque, que detectaron movimientos sospechosos. Así pues, Ricart, según fuentes policiales, estaba a cargo de uno de estos pisos investigados, y que funcionaba como un punto de venta de cocaína, heroína o crack y también de consumo para los usuarios.
También una jeringuilla cargada
Según adelantaba El Periódico, al entrar en el ‘narcopiso’ regentado por Ricart los investigadores hallaron una jeringa cargada y preparada para ser inyectada. Algo poco frecuente en la actualidad, pues los narcopisos de Barcelona han dejado de funcionar como salas de venopunción clandestinas. En el barrio del Raval siguen activos una veintena de pisos en los que se vende droga, pero, solo en algunos, los traficantes consienten el consumo.
En el caso de los detenidos, “trabajaban” a merced de una organización criminal dominicana, como las que se hicieron con el negocio de los 'narcopisos' antes de la primera gran operación Bacar de 2018.
El pasado de Miquel Ricart
Cabe recordar que Miquel Ricart fue condenado a 170 años de prisión por participar en la violación, tortura y asesinato de Miriam, Toñi y Desireé, ‘las niñas de Alcàsser’, el 13 de noviembre de 1992, junto con su amigo Antonio Anglès, a quien nunca se pudo llegar a detener. Dicha sentencia fue ratificada por el Supremo en 1999.
Ricart ingresó en la prisión Herrera de la Mancha hasta el 29 de noviembre de 2013, cuando con 44 años, quedó en libertad, habiendo cumplido tan solo 21 años de prisión. Logró beneficiarse de la derogación de la doctrina Parot, por parte del Tribunal Europeo de Derechos Humanos, que concluyó que esta fórmula de calcular los años de prisión perjudicaba gravemente los derechos de los internos.
De este modo, el asesino de Alcàsser pudo salir antes de prisión. Si la doctrina Parot no hubiese sido anulada, su puesta en libertad estaba marcada para el 19 de enero de este próximo 2023, cuando hubiese cumplido las tres décadas en prisión marcadas como límite máximo por el Código Penal.