Desde las diez de la mañana, la Guardia Urbana de Barcelona (GUB) ha puesto en marcha un operativo policial, junto con los Mossos d’Esquadra y la Policía Portuaria, contra la venta ambulante irregular, establecida con el “top manta”. Los cuerpos policiales se han desplegado por los “puntos calientes” de la ciudad, es decir, las zonas habituales de venta, para evitar que los manteros se instalen en ellas e invadan la vía pública, más que haya detenciones o decomiso de material.
La intención de las policías es evitar que puedan colocar la manta y en el caso de hacerlo, les ordenarán irse. Dicha operación se ha iniciado este lunes patrullando el concurrido paseo de Joan de Borbó, una de las zonas más frecuentes del “top manta”, y se repetirá en otros puntos de la ciudad, como el muelle de Barcelona, la plaza de Catalunya, las Ramblas o el paseo de Gracia. El dispositivo se mantendrá previsiblemente durante todo el día, incluso, toda la semana, según han confirmado fuentes de la GUB a eltaquigrafo.com.
Saturar de policías los puntos calientes
El dispositivo pasa por saturar policialmente estos espacios para evitar la instalación de los vendedores y busca garantizar la seguridad pública y el uso de espacios públicos y privados. Tras dar luz verde al operativo, el teniente de alcalde, Albert Batlle, ha explicado que un centenar de agentes se instalarán de manera "permanente" en los puntos más habituales de venta clandestina.
Este dispositivo policial contra la venta ambulante no autorizada da continuidad, según la Urbana, a otros dispositivos desplegados en los últimos meses en los principales puntos donde se produce este fenómeno, como plaza de Catalunya y el Portal de la Pau.
Lucha contra el “top manta”
La lucha contra el “top manta” es uno de los objetivos del Ayuntamiento y una de las promesas electorales de su concejal de Seguridad, Albert Batlle. Como ha publicado El País, Consistorio y Generalitat se han ido pasando la responsabilidad de liderar la lucha contra este tipo de venta. Mossos, que participa en la operación de hoy con equipos de orden público por si pudiese haber algún tipo de altercado, considera que es competencia del Ayuntamiento y el Consistorio pide que el trabajo se haga a medias.
Los agentes han ido advirtiendo a los manteros, durante estos días, que debían abandonar la zona, que se ha visto masificada por este tipo de venta en los últimos meses. Fuentes policiales calculan que hay más de un millar de vendedores ambulantes irregulares que trabajan en las calles de Barcelona.