En la mañana de este jueves, Adriana, la madre de Carolina, la niña hallada muerta este lunes en un hotel de Logroño, se ha acogido a su derecho a no declarar ante la Policía. Al finalizar el plazo máximo de 72 horas de detención, ha pasado a disposición judicial y, por la tarde, ha prestado declaración, durante más de cuatro horas, ante el juez de guardia, quien ha decretado su ingreso en prisión, acusada de homicidio.
Según ha informado el Tribunal Superior de Justicia de la Rioja (TSJR), la Fiscalía, en su informe, había solicitado la misma petición que ha ratificado esta misma tarde el juez.
Por la mañana, ante la Policía
Adriana ha salido del hospital, este jueves, para ir a la Jefatura Superior de Policía de La Rioja. Según sus abogados, la mujer «está serena, dentro de lo que cabe» y se ha acogido a su derecho a no declarar, aconsejada por su defensa.
Llevaba varios días sedada en el hospital y, en la mañana de este jueves, los médicos han dado permiso para preguntarle. La han llevado a la Jefatura de Policía, pero no ha contestado ni una sola pregunta. Lo único que Adriana dijo a los policías cuando entraron en la habitación del hotel donde encontraron a la pequeña es que no sabía cómo había muerto Carolina, pero estaba en shock, ausente y ni siquiera colaboró en la búsqueda de su madre.
Sin antecedentes psiquiátricos
La investigación se centra en las cartas que escribieron Adriana y su madre, Olga, en las que hablaban de sus planes de suicidio y de sus relaciones de pareja. La hermana de Adriana ha explicado hoy que la noche del domingo ya dieron la voz de alarma al ver que no regresaban a casa. Ha asegurado también que ninguna de las dos mujeres tenía diagnosticado ningún trastorno mental ni estaba en tratamiento psiquiátrico.
Las extrañas circunstancias que rodean al caso han dado pie a diversas especulaciones sobre el móvil del posible crimen. Es por ello, por lo que el delegado del Gobierno en La Rioja, José Ignacio Pérez Sáenz, ha declarado que «ante determinados bulos e intentos de hacer novelas» sobre este suceso, las pruebas médicas han determinado que la menor «tenía o había tenido neutropenia febril», una afección relacionada con el recuento de leucocitos «no grave».
Precisamente, Pérez reveló ayer ante los periodistas que la actitud de la madre de la pequeña hacia las autoridades que investigan el caso ha sido, hasta el momento, «poco colaborativa» y «ausente» para esclarecer lo sucedido, ya que no quiso declarar ante la Policía Nacional el pasado lunes.
Niega haber cometido el crimen
Según aseguró este martes el delegado del Gobierno en La Rioja, «la madre está ausente, como si no hubiera cometido nada». No concreta quién, ni cuándo, solo dice que «se ha muerto». Carolina fue encontrada muerta, este lunes, en la habitación 404 del hotel Los Bracos, de Logroño. Su madre fue localizada sentada en la ventana con cortes en los brazos y la intención de suicidarse. Además, la abuela de la menor apareció muerta este martes en el cauce del río Ebro.
Pérez ha reclamado «prudencia» a la hora de calificar con un determinado tipo de delito lo ocurrido. Algunos medios de comunicación ya habrían publicado que la niña falleció asfixiada pero, por el momento, la única información oficial es que la autopsia preliminar no ha sido concluyente. Se han trasladado unas muestras para que sean analizadas en el Instituto Nacional de Toxicología, en Madrid, y los resultados podrían demorarse, mínimo, tres semanas.