Tras los análisis forenses del cuerpo de Esther y con la investigación abierta, los agentes de la Guardia Civil han vuelto a registrar la casa de óscar S., el principal sospechoso de la desaparición de Esther López en Traspinedo. Los agentes centran ahora su principal hipótesis en que el homicidio de Esther pudo producirse utilizando el coche del sospechoso para atropellarla, y que luego éste habría escondido el cadáver y lo habría dejado donde se encontró varios días después.
En busca de evidencias en el vehículo
El sospechoso, que está presente durante el registro, no volvió a dormir a casa la noche en que Esther desapareció y lavó el coche varias veces desde que apareció el cadáver. Según adelanta Nius, se trata de un Wolkswagen Troc de color gris oscuro, casi nuevo, en el que los agentes han encontrado una fisura en la parte frontal. La Guardia Civil también está volviendo a examinar el vehículo, ahora en busca de evidencias de un impacto. Igualmente, se va a analizar el ordenador de a bordo para extraer alguna información que pueda ser de utilidad
Los agentes también han pedido al sospechoso que entregue la ropa que llevaba aquella noche, para analizarla y poder extraer algún tipo de evidencia que ayude a esclarecer el caso.
Todo limpio y ordenado
Recodar que el cuerpo de Esther López apareció 24 días después de su desaparición en un lugar que ya había sido peinado varias veces por la Guardia Civil, y que sus pertenencias aparecieron todas al lado del cuerpo, incluido su teléfono móvil, que se encontraba dentro del bolso, e cuál había sido limpiado tan a conciencia que no tenía huellas ni de la propia Esther.