Los Mossos d'Esquadra han iniciado esta mañana una operación en Barcelona contra la banda dedicada a robos violentos y a otros delitos contra el patrimonio, que principalmente asaltaba a turistas en la capital catalana, portadores de relojes de lujo.
Según publica El País, desde primera hora de esta mañana, se están llevando a cabo varios registros de domicilios en el barrio de la Barceloneta, supuestamente vinculados con la banda de ladrones.
Récord el domingo pasado
Justo este domingo, como ha podido saber eltaquigrafo.com, fue un día negro en cuanto al robo de relojes de lujo. En menos de ocho horas, se registraron cuatro casos, todos mediante el método del “tirón”.
Dos de los casos comunicados este domingo y denunciados ante los Mossos d’Esquadra se produjeron en Ciutat Vella con tan solo 10 minutos de diferencia. Dos horas más tarde, tuvo lugar otro robo con violencia en el cruce de las concurridas calles Diputación y Paseo de Gracia (Eixample) y el último, de madrugada, en el distrito de Sant Martí.
Durante el primer tirón, registrado a las 19:00h de la tarde en Ciutat Vella, un hombre marroquí, en bicicleta, le arrancó el reloj a un turista francés. Éste mordió la mano al ladrón en el momento del tirón, pero aun así, el hombre consiguió huir del lugar. El objeto sustraído tenía un valor de 10.000 euros. Diez minutos más tarde, en otra zona del mismo distrito, cuatro jóvenes, de nacionalidad española y de unos 20 años, sustrajeron el reloj y el móvil a otro turista. En este caso el valor del robo ascendía a 20.000 euros.
Dos horas después de estos primeros incidentes, otro hombre, de origen marroquí, vestido de blanco y con gorra, sustrajo de un tirón el reloj de otro turista, de nuevo, con un valor de 10.000 euros. Por último, a las 06:00h de este lunes, en la calle Marina (Sant Martí), un hombre de 50 años fue víctima de otro robo con violencia. En este caso, los ladrones se le tiraron encima y le robaron el reloj, valorado en 5.330 euros.
Uso de extrema violencia
En este tipo de robos, los ladrones observan a sus víctimas, estudian sus gestos durante unos minutos y les atacan haciendo uso de una violencia extrema. Normalmente, se centran en turistas o personas mayores.
De un tirón, los agresores les arrancan, literalmente, el reloj de su muñeca. Estos ataques, que suelen sorprender a las víctimas, pueden provocarles serias lesiones a consecuencia de la violencia con la que se ejecutan. De hecho, la viceministra surcoreana que falleció recientemente en Barcelona perdió el conocimiento al caer al suelo tras un intento de robo al tirar con fuerza de su bolso.