Un hombre de 35 años ha muerto este domingo tras recibir un disparo en el interior de una finca de Ciudad Real. Tal y como han confirmado fuentes de la Delegación del Gobierno en Castilla-La Mancha a la agencia EFE, los hechos se produjeron durante la madrugada del domingo, cuando el dueño de la vivienda escuchó ruidos sospechosos en su finca y se levantó para comprobar la causa. El hombre, que ya había sido víctima de varios robos, cogió un arma para defenderse. Fue entonces cuando sorprendió al presunto ladrón en el interior de su propiedad, tratando de forzar la cerradura de su casa.
El hombre, de 77 años, no dudó en apretar el gatillo del arma de fuego contra el intruso, que falleció a causa de los disparos. En total, efectuó tres disparos, resultando uno de ellos mortal para el joven. Posteriormente, fue el propio autor del crimen quien llamó a la Policía Nacional para informar de lo que había sucedido. Hasta el lugar se desplazó una UVI móvil que intentó reanimar a la víctima, que finalmente ha muerto. Se trata de un joven extranjero de 35 años que cuenta con antecedentes penales.
El anciano está detenido como presunto autor de un delito de homicidio por la Policía Nacional, que ya ha abierto una investigación para esclarecer las circunstancias en las que se produjo el tiroteo.