A estos jóvenes, la fiesta y el subidón del alcohol se les bajó de golpe cuando, tras ofrecerle una copa por la ventanilla a los viajeros del coche de al lado, éstos encendieron las luces azules y les dieron el alto. Los chicos, visiblemente alterados, de fiesta en el interior de un auto por las calles de Madrid, han protagonizado uno de los episodios más virales de esta Semana Santa.
Uno de ellos grabó la escena: el conductor bajó la ventanilla del vehículo, sacó un vaso de cubata, bien cargado de alcohol, y entre risas y músicote, se lo ofreció a los viajeros del coche que se había parado justo a su lado. Los receptores, también entre risas, lo cogieron para, inmediatamente después, encender las luces y darles el alto. Sí, era la Policía. Acto seguido, el cámara paró el video. La fiesta se había acabado.
