Ocurrió en Raleigh, Carolina del Norte (Estados Unidos). Un grupo de once personas que se hace llamar Blue Igloo se manifestaban este fin de semana contra el confinamiento por la crisis del coronavirus entraron armados en un establecimiento de una cadena de bocadillos.
Según ha informado la NBC, algunos de los manifestantes iban fuertemente armados, incluso uno de ellos, con «lo que parece ser un lanzacohetes AT4», un arma destinada a derribar tanques. «Somos un grupo pacífico, y nos gustaría mantener eso a toda costa. No buscamos pelea, sino lo contrario. Una sociedad armada es una sociedad educada», afirmaron a la cadena de televisión.
Uno de los integrantes de Blue Igloo grabó la entrada en el restaurante y lo compartió en Facebook. Él mismo, mientras graba le dice al empleado del restaurante: «¿Podemos comer aquí? No queremos que esto parezca una amenaza o una intimidación, por eso pregunto».
Primer día de desescalada
El suceso se llevó a cabo el primer día de la nueva fase de desescalada en Carolina del Norte, Ellos, aseguran que «lo del sábado no era una protesta, era una reunión para apoyar nuestra libertad como americanos concedida por Dios. Salimos a pasear para respirar aire fresco, luz de sol y un muy necesitado ejercicio».
En esta primera fase se permitió la apertura de parques y ciertos negocios, pero siempre guardando la distancia de seguridad, con reuniones de personas que no pueden superar los 10 individuos.