En un extenso auto de 215 páginas el titular del juzgado número 4 de la Audiencia Nacional, el juez José Luis Calama, identifica a las 105 personas que irán a juicio por esta macrotrama de fraude fiscal que se destapó en el año 2012 y que estaba liderada por el ciudadano chino afincado en España, Gao Ping.
Entre los acusados se encuentran un miembro de la Guardia Civil, un policía nacional y el actor porno Nacho Vidal, conocidos empresarios españoles y gestores de entidades bancarias.
8 años de compleja investigación
Tras 8 años de instrucción el juez Calama ha enviado la causa a la Sala de lo Penal de la Audiencia al llegar a la conclusión que los hechos investigados son constitutivos de delitos de organización criminal, delito contra la Hacienda pública, falsificación de documentos públicos y mercantiles.
El juez define en su escrito como la organización liderada por Gao Ping estaba perfectamente organizada para bajo una estructura comercial, basada en el negocio de la importación y venta de productos procedentes de china, generar ingentes cantidades de dinero negro mediante la venta de productos en los conocidos bazares o tiendas chinas en España.
Gao Ping, el líder
En lo referente a Gao Ping, el juez lo considera el máximo líder de la organización criminal, siendo este quien controlaba y dirigía las diversas sociedades mercantiles que forman parte del entramado empresarial creado, figurando todas ellas a nombre de testaferros diferentes.
Ping impondría de este modo su jerarquía pese a las desavenencias que mantenía con otros miembros de la organización. También establecía las líneas generales a seguir en la gestión, administración y explotación de tal entramado empresarial, nombrando a todas las personas que desempeñaban los cargos más relevantes. Según el juez todos los integrantes de la organización criminal le profesaban una obediencia absoluta.
Más de 16,9 millones de euros defraudados
En el auto judicial que se ha hecho público este miércoles, y al que ha tenido acceso este medio, también se establecen las cantidades defraudadas a Hacienda entre el 2010 y el 2012, por la organización criminal. La Agencia Tributaría ha establecido que el total defraudado ascendería a 16.922.735 de Euros entre aranceles no pagados y fraude de IVA.
El modus operandi de la organización para generar este fraude fiscal era el de declarar en las aduanas españolas los productos importados por debajo del precio real. Del total de mercancías que llegaban a España se declaraba en la aduana un máximo del 10% de su valor, quedando el 90% restante sin declarar. Una vez realizadas las ventas de esas mercancías, solo se podían acreditar los productos correspondientes a ese 10% manifestado en frontera, generando, el 90% de las mercancías no declaradas, enormes cantidades de dinero negro que luego debían ser enviados a China para fabricar más productos y como beneficios de la organización.