Después de siete años desde que se inició la operación policial Trinity, la Audiencia provincial de Tarragona ha condenado a 240 años de cárcel a Jean Luc Aschbacher, el líder de la mayor red de pederastas y distribuidores de pornografía infantil detectada en España, cuya sede central de operaciones se situaba en un piso de Tortosa (Tarragona).
En la misma sentencia se ha condenado a 19 años de cárcel a Bernard Georges Arson, como principal colaborador de Aschbacher, pero reconociendo que él no cometió abusos sexuales, limitándose su participación en los hechos a la grabación, producción y distribución de los abusos cometidos por el líder de la banda a más de 100 menores de edad.
Ambos condenados son de nacionalidad francesa y habrían llevado a cabo el rodaje y distribución de más de 300 piezas de pornografía infantil, consistente en la grabación los abusos que cometían a las víctimas.
Quince años actuando impunemente
Los hechos se destaparon en 2015, cuando una madre de una de las víctimas y la responsable de la DGAIA (Direcció General d’Atenció a la Infància i Adolescència) en les Terres de l’Ebre en aquél momento, denunciaron que los menores, siempre de bajos recursos y en situación de vulnerabilidad, regresaban a casa y al centro con dinero y tabaco.
La red captaba menores entre 11 y 16 años en situación vulnerable para abusar sexualmente de ellos y grabar los abusos, normalmente en un piso de Tortosa, aunque ha quedado probado que también actuaron en Tailandia, Barcelona y Marruecos.
Los pederastas actuaron durante más de 15 años con total impunidad, camuflados bajo al empresa legal “Productos Aschbacher” domiciliada en Tortosa.
Más de cien menores víctimas, siete de ellos tutelados
Aunque en la investigación se cuantificaron más de un centenar de menores que habían sido víctimas de abuso y grabados para crear material de pornografía infantil, finalmente sólo 18 pudieron ser identificados, de los cuáles siete eran menores tutelados por la Generalitat a través de la DGAIA.
Detenciones, huidas y puestas en libertad de los implicados desde 2015
Los Mossos d’Esquadra detuvieron en 2015 a siete hombre pertenecientes a la red que, aunque inicialmente ingresaron en prisión, quedaron en libertad a los pocos meses. Los dos hombres ahora condenados, y un tercero, Youness en Naciri, que aun se encuentra en busca y captura, huyeron y no se presentaron al juicio que se celebró en la Audiencia de Tarragona en 2019.
Sin embargo, Aschbacher y Arson fueron detenidos en mayo de 2021, y juzgados en febrero de este año. Desde su detención se encuentran en prisión preventiva por riesgo de fuga.
Pueden no entrar en prisión
Finalmente, el líder de la red ha sido condenado a 240 años de cárcel por delitos de captación y abuso sexual continuado a menores, producción y distribución de pornografía infantil y pertenencia a organización criminal.
Por su parte, Arson ha sido condenado a 19 años de prisión por captación de menores, producción y distribución de pornografía infantil, pero no por abusos. Debido al cálculo de las condenas, en su caso el triple de la mayor, esto es, 3 años por 3, la condena efectiva para Arson sería de 9 años de prisión.
Sin embargo, como ya ha pasado 4 años en prisión preventiva y a partir de la mitad de la condena, los presos empiezan a disfrutar de permisos, el abogado de Arson ha declarado que es muy probable que su cliente no tenga que volver a ingresar en prisión.
Este hecho, unido a la huida del tercero de los implicados, Christian, socio de Aschbacher, para quien la fiscalía pedía 200 años de cárcel, que ni siquiera ha podido ser juzgado, causa un gran malestar tanto en las víctimas y sus familias, como en la actual directora de la DGAIA, Esther Cabanes, que fue quien destapó el caso en 2015 en Tortosa, ya que este organismo ejercía la acusación particular en este caso.