Mohamed Yassin Armani ha llegado a un acuerdo con la Fiscalía: acepta y reconoce los hechos y, a cambio, se le rebaja la condena de nueve a tres años de prisión por autocapacitación y autoadoctrinamiento de índole yihadista
La Audiencia Nacional ha condenado este lunes a Mohamed Yassin Armani a tres años de prisión por planear un atentado terrorista con un dron durante un partido del Barça contra el Real Madrid en el Camp Nou. El acusado ha llegado a un acuerdo con la Fiscalía y ha aceptado que se le condene por captación y adoctrinamiento de índole yihadista.
El fiscal pedía 9 años en un inicio
En su escrito de acusación, recogido por Europa Press, la Fiscalía solicitaba que fuera condenado a nueve años por un delito de participación activa en organización terrorista y, en caso de no poder probarse tal extremo, pedía para él tres años y seis meses de prisión por un delito de autocapacitación y autoadoctrinamiento. Ha sido este segundo delito el que ha motivado el acuerdo con el fiscal, que ha añadido otros 6 años de inhabilitación absoluta, y así se plasmará en la sentencia, según ha adelantado el tribunal.
"En efecto el acusado, en el curso de un proceso de rápida evolución, y vinculado al confinamiento de la pandemia de covid se convirtió en un miembro de Daesh, organización a la que ha jurado lealtad y obedecer todo lo que le mande su líder"
Para la Fiscalía, el acusado transitó, a través de varias publicaciones en sus perfiles sociales, contenidos provenientes de los órganos de difusión de propaganda del Daesh, hasta su adhesión a los postulados de la organización terrorista y su plena integración en la misma. "En efecto el acusado, en el curso de un proceso de rápida evolución, y vinculado al confinamiento de la pandemia de covid se convirtió en un miembro de Daesh, organización a la que ha jurado lealtad y obedecer todo lo que le mande su líder", detalla.
Explosivos escondidos en un dron
Con todo, un miembro del Estado Islámico le contactó y le prometió "un sitio en el paraíso", además de la "redención" si cometía un atentado que purificaría su alma.
Es por ello, por lo que Mohamed planificó el atentando durante “el clásico”. El ataque consistía en detonar un explosivo en el Camp Nou mediante un dron que llevaría la carga y que sería detonado mientras se disputaba el Barcelona - Real Madrid. El DAESH le enseñó a manejar drones y estaba tan convencido de querer formar parte de la organización terrorista que "estaba dispuesto a desplazarse al extranjero para combatir en las filas del DAESH y, de no ser ello posible, a la comisión de atentados terroristas", añaden fuentes de la Guardia Civil.