Un nuevo revés enturbia el dulce momento que atraviesa el Partido Popular, al que las encuestas de intención de voto auguran una ligera recuperación después de la amplia victoria de Ayuso en la comunidad de Madrid. El juez de la Audiencia Nacional que instruye la operación Kitchen, Manuel García Castellón, ha citado como investigada a la que fue uno de los pesos pesados del partido: María Dolores de Cospedal. Junto a la exsecretaria general del PP se sentará también, en el banquillo de los acusados, Ignacio López del Hierro, su marido, para rendir cuentas sobre una supuesta desviación de fondos públicos destinados al Ministerio del Interior para espiar a Luis Bárcenas, el extesorero del PP.
La imputación de Cospedal y de su cónyuge se produce meses después de la solicitud de la Fiscalía Anticorrupción, que los considera autores de un supuesto delito de cohecho, malversación y tráfico de influencias. Además, el magistrado de la Audiencia Nacional ha hecho extensa la citación al exjefe de Gabinete de Cospedal, José Luis Ortiz, al exsecretario de Estado de Seguridad, Francisco Martínez, y al polémico excomisario y ya asiduo en los tribunales por innumerables corruptelas, José Manuel Villarejo.
"No delates a nadie"
La imputación llega después del análisis de numerosos documentos y de la escucha de grabaciones recuperadas por los investigadores en el domicilio de Villarejo tras su detención. En una de esas conversaciones, Villarejo le explica a su interlocutor que, tras una investigación parapolicial orquestada por la cúpula del PP sobre Luís Bárcenas, “La Cospe” lo llamó nerviosa y le dijo: 'joder, no delates a nadie'. A lo que él le respondió '¿Cómo que no? Os busco la ruina a todos, al primero al "barbas" (Mariano Rajoy), a tomar por culo.”.
Esta conversación constituye uno de los puntos angulares sobre el que se sustenta la macrocausa Tándem y que deja entrever que, presuntamente, dos de los rostros más conocidos del PP, María Dolores de Cospedal y Jorge Fernández Díaz, tejieron toda una trama de investigaciones parapoliciales, sufragada con fondos reservados, para sustraer información sensible de Bárcenas con el objetivo último de ocultársela a la justicia.
