Las cinco personas estaban acusadas por la muerte de una niña de tres años que se ahogó en una piscina pública en mayo de 2017 en una clase de natación en Ripoll. Tanto los cuatro monitores como el director del equipamiento han reconocido que existió negligencia en su proceder y han acordado una pena de un año de prisión con la Fiscalía.
Sin ingresos en prisión
Ninguno de ellos tiene antecedentes penales, por lo que evitarán el ingreso en prisión. Además, Los cuatro monitores podrán seguir ejerciendo su trabajo como hasta el momento, ya que no han sido inhabilitados para ello.
El padre de la niña, en declaraciones recogidas en el diario ara.cat, se ha mostrado satisfecho por el acuerdo alcanzado y por el hecho de que las cinco personas encausadas reconocieran su culpabilidad de los hechos. En cuanto a la indemnización, los seguros ya han ingresado los 166.000€ a la familia de la menor.