
En dos semanas hemos visto cómo los medios se contra programaban con mujeres que quieren hacerse famosas a costa de Bertín Osborne
Las redes sociales explotaron cuando Jorge Javier Vázquez, en un giro de guion que ya preveía, conectó en directo desde el plató de “Cuentos Chinos” con Belén Esteban y Lydia Lozano. ¿Regresa "Sálvame"? Todo dependerá de las audiencias.
Lo único cierto es que el share se llevó por delante el programa Vázquez, que no resistió frente a Pablo Motos y sus entrevistas, como la realizada a Isabel Pantoja, a pesar de que otros programas lo intentasen con personajes del corazón de segunda y que él sea un monstruo de la comunicación. Pero si ha habido un tema de conversación predominante en las últimas dos semanas, ha sido el de las supuestas infidelidades de Bertín Osborne, a quien tuve la oportunidad de saludar este verano en la terraza del restaurante Cipriani de Marbella. Parecía estar bien, y no pude presagiar la tormenta mediática en torno a su reciente paternidad. Las revistas del corazón, al igual que muchos programas de televisión, se contra programan con derivadas de personajes cercanos al cantante. Mientras Lecturas llevaba en portada a Fabiola, la ex esposa de Bertín; Gabriela, la futura madre de su hijo, ha debutado con fuerza en el panorama mediático de este país.
Me enteré de todo eso durante un viaje con mi hermano Santi por Milán, donde todo paseo comienza en la Plaza del Duomo, el corazón de la ciudad. La inconfundible silueta de la catedral gótica acapara todas las miradas. Allí, de repente, escuché a unos españoles hablar de Bertín. No pude resistirme, saqué el teléfono y comencé a leer la historia. Un par de llamadas después, me enteré de que no sería el último sobresalto para el jerezano y de que no sería el único personaje famoso al que acusaron de tener hijos fuera del matrimonio.
Días después, Jordi Basté en RAC1 entrevistaba al comisario Villarejo con un invitado de excepción: el president Artur Mas, a quien habían intentado ensuciar con una supuesta hija ilegítima que nunca había existido. Y yo me pregunto: ¿es normal un país que mezcla el mundo del corazón con las investigaciones policiales y que, encima, las falsea?
Ya de vuelta en Barcelona, cubrí los juzgados donde Alexia Putellas e Irene Paredes declararon por el ‘caso Rubiales’. Estuvieron reacias a hablar con los medios de comunicación que estábamos allí cubriendo su declaración testifical; aunque, obviamente, pronto comenzaron las filtraciones desde el interior de los juzgados. Ratificaron los hechos que la Fiscalía denunció en su querella contra Rubiales y las presiones sobre Jenni Hermoso para que dijese que el beso fue consentido.
Por la tarde, en una zona de la ciudad, me encontré con el conocido paparazzi Gustavo González. Charlamos un rato mientras él esperaba, cámara en mano, a ver a uno de los personajes que más dará que hablar en el mundo del corazón en los próximos días. Es curioso cómo se habla de los reporteros gráficos cuando no están delante y, sin embargo, cuánto se disfruta de su trabajo. Gustavo, esposo de María Lapiedra, es un claro ejemplo de supervivencia en este sector que atraviesa tiempos difíciles. Es buena persona y profesional, al igual que mi amigo Marc Leirado, con quien cené el viernes por la noche antes de regresar a mi ciudad y reunirme con mi familia.
Leirado acaba de publicar una entrevista con Alexis Ledgard, quien durante años creyó que era hijo biológico de Bigote Arrocet y que, nuevamente, arremete contra el chileno para defender el legado de María Teresa Campos. Por suerte, el sábado pude viajar a ver a mi familia y, a pesar de estar enferma, curarme con la sopa de mi madre que hace milagros. En casa, siempre me doy cuenta de que lejos del enloquecido mundo del corazón, se ven las cosas desde otro prisma y que esos hijos ilegítimos, tardíos o perdidos, forman parte de un mundo que me encanta observar, pero desde la barrera.
El fin de semana, además, vi el documental de David Beckham, donde su esposa, Victoria, confiesa que vivió en España los peores momentos de su vida debido a los paparazzi que buscaban fotos de infidelidades de su marido. Fue en nuestro país donde Rebecca Loos, la asistente personal de la familia, se hizo famosa por tener un affaire con el futbolista.
Así es la vida del corazón y así se la hemos contado. ¡Feliz fin de semana!